Para ti, amor mío
Este otoño sin darse
cuenta
se ha enamorado de la primavera.
Aunque entre los dos
hay un verano entero
de playas, amores,
ríos y noches
que los separa,
parece que en las hojas
del
otoño se han quedado
los colores de la
primavera.
El otoño mira atrás
donde las noches se
refugian
en el verde y azul de
los días
y no recuerda haber
visto
una primavera tan
preciosa,
y ella encuentra
que el dorado luminoso
de él
no está nada mal.
Pasa el tiempo por el
aire
y deja caer el amor
entre los árboles y
los prados
de las estaciones.
La distancia los
separa,
pero el otoño
no deja de mirar a la
primavera,
y a ella se le acelera
el aire y el cielo es
más azul
desde que ha visto al
otoño.
El viejo otoño de nuevo
se ha enamorado
del verde de la
primavera.